REVISTA DE INGENIERIA DYNA

Según Elon Musk, la razón para frenar un avance definitivo de la propulsión eléctrica en el automóvil se basa en el elevado precio y características de duración y recarga del sistema de baterías. Para solucionar lo primero expone un plan de integración vertical en el diseño y la fabricación de baterías que, según sus cálculos debe revertir en una mejora de un 54% en el alcance, un 56% en el precio y un 69% en la inversión de capital para la fabricación. Así detallado en la proyección que acompañaba la propuesta.

Actualmente TESLA, aparte de otros eventuales proveedores, fabrica baterías PANASONIC en su planta de Nevada, tanto para automóviles como para grupos estándar de generación solar individual. Asegura que próximamente conseguirá, solo con modificaciones estructurales, mejorar su alcance en un 16% y reducir el costo en un 14% con un nuevo diseño. Pero simultáneamente está arrancando una nueva planta en Fremont (California) que se iniciará con 10 GWh anuales con su nuevo diseño, aunque Musk sugiere que una planta apropiada debería acercarse a los 200 GWh. De todas maneras, se propone producir 100 GWh en 2022, para tratar de alcanzar con el total de sus plantas disponibles los 3 TWh en 2030, contando incluso con nuevas alianzas con CATL y LG Chem.

En el aspecto tecnológico no están muy claros los avances que se propone introducir TESLA para lo que llama “nuevos diseños” de ánodos o cátodos. Pueden estar en la eliminación de disolventes, utilizando un revestimiento seco de electrodos, ir a ánodos con silicio o cátodos con alto contenido en níquel para eliminar el cobalto. La realidad es que, actualmente, el modelo 3 de TESLA vende cuatro veces más que el siguiente automóvil totalmente eléctrico del mercado.